DEL FINAL
Era una noche fresca de verano y con luna llena. Sunthas observaba por la ventana. -No puede ser una noche mejor. Dijo mientras se volvía y miraba a su mujer, ella sonrió y asintió triste. Se acercó a su marido y empezó a ayudarle a colocarse la armadura. -No recordaba que pesara tanto le dijo…