Moscas, hedor, podredumbre …. en ningún campo de batalla se vería jamás una batalla como la que comenzaría allí. No eran ejércitos de hombres, orcos o trasgos… eran ejércitos de almas en penas, de criaturas sin cabida en la tierra…. seres que solo podrían existir allí…y en pesadillas. Las huestes se contaban por miles,…
Mis ojos han visto verdaderas maravillas, lugares y seres que muchos que viven y muchos que tendrán que vivir jamás verán y solo sabrán de ellos en cuentos y leyendas. He viajado desde el frío norte de las montañas hasta el cálido desierto del sur. He comido y bebido junto a héroes y seres de…
Desde que salimos de usûlun, nuestro hogar, hemos sufrido las penurias del camino, el dolor del combate y la afición del que sufre. Pocos momentos de paz y tranquilidad hemos tenido, estos se resumen a unas pocas horas al día delante de la hoguera, donde ni su calidez podía arrancarnos el frío de la noche.…
Glorfindel, Capitán de la casa de Elrond, sabio entre los suyos. Glorfindel el allegado a Varda… Hermoso entre los elfos, el de los cabellos dorados. Afortunada raza la vuestra, que visteis la tierra lejana y habéis andado, horadado y modelado esta tierra a voluntad. Por ello también enemigos del Señor Oscuro desde el comienzo de…
SUNTHAS ESPINO NEGRO, ESCUDO QUEBRADO: “Mi señor Elrond, Hijo de Eärendil y Elwyng, heraldo de Ereinion Gil-Galad . Vuestro hermano Elros fue el primero de Numenor y señor de Las Tres Casas de los Hombres. Encarasteis varias veces al mismísimo señor oscuro, poderoso guerrero y gran sabio. Quizás de entre todos los primeros nacidos solo…
El terrible golpe… Aún lo noto, aún veo como los enormes brazos alzan el martillo en su mortal arco y descarga sobre mi escudo el golpe. Aún siento como mi brazo cede, aún siento como mi cuello se quiebra. Una y otra vez, una y otra vez, …. Veo descender el terrible martillo…a veces por…
Noches frías y oscuras, donde aun con el calor de una hoguera es difícil entrar en calor. Las ropas, caladas de todo el día , apenas se secan, la armadura y la cota de mallas pesan aún más, el frío las hace más pesadas… Todos esperamos el momento del descanso, en el que cada uno…
De nuevo siento cada hueso de mi cuerpo al quebrarse, cada músculo liberando toda la tensión a causa de la profundidad de los cortes… El terrible dolor de cabeza me nubla poco a poco la visión, el sentido del combate… El yelmo del portador se me hace casi insoportable. Pero a pesar de todo soy…
Graben… Esa palabra difícilmente la olvidaremos. Difícilmente olvidaremos el nombre de un linaje maldito, el nombre de una familia oscura. De cómo los conocimos y como nos enfrentamos a ellos será el contenido de mis próximos relatos, los cuales empiezan como todos, con unos momentos de tranquilidad, los cuales últimamente escasean y son verdaderamente esperados,…
De nuevo nos hallamos descansando bajo una noche fría y estrellada, una hermosa noche. Adrahil ha encontrado un buen lugar para acampar, como siempre, y mientras Gulthar explora los alrededores en busca de algún indicio amenazador con Forak, Dîn prepara un hoyo, forrado con piedras , donde encendera un buen fuego y se mantendra toda…
Retomo de nuevo mi diario, donde lo deje… Ah! Ya… En nuestro último encuentro en la ciudad sumergida de Lond Daer, los usûlunis y los golems. Ya os comenté que después de ese combate tuvimos que recuperar fuerzas y sanar heridas. Y continuamos con la exploración de los túneles. Después de una bifurcación llegamos a…
Mi intención era narraros los combates de Lond Daer, y sin embargo la injusticia de Vengaree ha ocupado mis pensamientos. Ya expuesto lo que pienso al respecto, os contare como fue la aventura de los usûlunis en las ruinas de la ciudad sumergida. Después de muchos esfuerzos para intentar explorar los túneles sumergidos, buscandolas ansiadas…
Lond Daer, recuerdo claramente ese nombre, aquellas ruinas malditas, sepultadas bajo la ira del mar desde hace cientos de años. Hace 8 años, poco tiempo después de que las primeras carretas se asentaran en Usûlun, partimos Gulthar, Dîn y Sunthas, para descubrir los tesoros escondidos en aquellas ruinas. Poco encontramos entonces, un puñado de monedas…
“Trataré de, en cierta forma, plasmar en este viejo papiro, todos aquellos sueños que voluntaria o involuntariamente invaden mis noches y mis días, y que en la medida de lo posible, guía mis pasos en los momentos de incertidumbre. No solo aquellos sueños que se me muestran como un río cristalino en una mañana fría,…